Marisol Córdoba.
Durante la detención, que sufriera la periodista Lydia Cacho el pasado 16 de diciembre del 2005, fueron cometidas diversas violaciones a sus garantías individuales por parte de los policías judiciales que detuvieron a la periodista, según se revela en el contenido del acta de la comparecencia que llevaron acabo diputados locales miembros de la Comisión de Gobernación del Congreso local en Puebla el pasado nueve de abril del año 2006.
Los policías judiciales que detuvieron a la periodista en Cancún José Montaño Quiroz, Jesús Pérez Vargas, así como Verónica Chávez Cruz, y María Irene Arteaga Rangel, -quienes se incorporaron con sus compañeros en el municipio de Esperanza puebla-comparecieron ante los diputados locales, a puerta cerrada y en privado donde dieron su versión de los hechos ante la Comisión de Gobernación. y cuyas declaraciones quedaran registradas en una acta, que se encuentra en poder de ladeocho.
De acuerdo a esta documentación se comprueban varias contradicciones en las declaraciones de los policías, y además se comprueban algunos de los señalamientos de la periodista al afirmar la vulneración de sus derechos individuales.
La comparecencia fue realizada por los diputados del PAN, Victor León Castañeda, Raymundo García García, del PRI, Alejandro Oaxaca, Norma Sánchez Valencia y del PRD por el diputado Rodolfo Huerta; el diputado Pericles Olivares Flores modero la comparecencia, en la que estuvo presente el abogado Isidro López García, en calidad de abogado particular de los judiciales y quien es miembro del “Foro poblano” organización de abogados ligada al Tribunal Superior de Justicia en el Estado de Puebla.
Una de las principales declaraciones que realizó el policía judicial con placa 191 a pregunta expresa por el diputado perredista Rodolfo Huerta , según consta en la pagina 12 de esta versión es si la periodista tuvo comunicación con las personas ajenas a la ejecución de la orden de aprehensión el policía José Montaño Quiroz agente no. 191 dijo: “¡no!, no tuvo pues una relación con otras personas, mas que con nosotros.”
Una de las contradicciones en la que cayeron los dos policías judiciales tanto Jose Montaño Quiroz como Jesús Pérez Vargas, se evidencia en las paginas 14 y 32 del legajo, donde declararon a pregunta expresa que al dejar a la periodista ante la Procuraduría del Estado de Puebla ellos se quedaron en el automóvil, y esto en la pagina 63, fue desmentido por la policía judicial con placa 468, Verónica Chávez Cruz, quien declaró que estos policías se bajaron con ellas para realizar los trámites ante la
Procuraduría.
De acuerdo a las declaraciones de los dos policías judiciales, según consta en la paginas 12 y 55 del acta , comprobaron lo que la periodista Lydia Cacho Ribeiro, había señalado que solo se le dio de comer una sola vez durante el trayecto, además de que las mujeres policías solo se incorporaron en la comunidad de Esperanza solo para “compañía” y para que los medios de comunicación vieran que llegaban mujeres.
En este sentido Verónica declaro que fue solo para acompañar a la periodista y no para ayudarlos a manejar según lo que detalla el acta en la pagina 48 y en lo declarado por el elemento policiaco Jesús Pérez Vargas.
En la pagina 62 del acta, la policía judicial Verónica Chávez, desmiente lo dicho por los policías judiciales en el que afirmarían que existió una platica “amena”, con la periodista la policía señala que no hubo platica alguna solo silencio absoluto durante el trayecto.
De acuerdo a lo detallado en la pagina 45 de esta acta, y según lo señalado en la comparecencia por el diputado Victor Leon Castañeda comprobó que el policía Judical Jesús Pérez Vargas no leyó el informe antes de entregarlo a la Procuradora Blanca Laura Villeda Martínez, y en este informe existen una serie de contradicciones, al entregado por el entonces director de la policía judicial Adolfo karam Beltran , como existian como el dia y la hora en que los policías salieron de puebla hacia el estado de Quinta Roo.
El contenido de esta comparecencia no fue dada a conocer a los medios de comunicación; y hasta el momento y con el argumento de los diputados, de que esperarán el dictamen final de la Suprema Corte de Justicia, la indagatoria se quedo en la congeladora.
Cabe mencionar que las preguntas se realizaron por espacio de 10 minutos por cada diputado y tuvo duración de aproximadamente de cuatro horas, además en esta comparecencia el diputado Pericles Olivares, intervenía cuando las preguntas a los judiciales no le eran muy convenientes e instó varias veces a los diputados a cambiar su pregunta.
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